domingo, 21 de noviembre de 2010

Gobernar dando participación y haciendo pedagogía

Les rompería todos los esquemas, tendrían que cambiar radicalmente su día a día, su funcionamiento, serían más accesibles a los ciudadanos, a las entidades, mas próximos.
Significaría entre otros, y valga como ejemplo, hacer todo un trabajo previo a la aprobación de presupuestos anuales, de ir a los barrios a explicarlos, dándole opción a la ciudadanía de conocer sus líneas fuerza, sus ejes maestros, prioridades, ¿ en lo social, en infraestructuras, en políticas activas para jóvenes, en...?, y claro, eso es descubrir la tarta y como ella es comida por sueldos, dietas ,protocolo e “imprevistos”. Para ir por este camino se ha de ser muy valiente, muy demócrata, tener muy claro el valor de la participación no a confundir con información de titulares, a destiempo e interesada. Supondría creer y valorar a los ciudadanos, haciéndolos partícipes, buscando su voluntaria y sana implicación, desde la no consigna o señal partidista o manipulación estrecha.
¿Saben ustedes lo que es una Audiencia Pública?, pues hay dos momentos en el curso político anual que se hacen merecedores de ella. La aprobación de los presupuestos y ordenanzas y tasas municipales o “de ciudad autónoma”, y la presentación del Plan de acción global anual o circunscrito en uno cuatrienal o como se tenga aprobado, donde se haría balance público y presentación de acciones, proyectos y correspondientes partidas. Pero claro está, lo que se hace ahora, que está a años luz, es de mayor comodidad y mejor seguir gobernando desde el concepto de cheque en blanco por los votos voluntarios o “trabajados”.
De todas maneras, continuo esperanzado y me doy un margen para que el resto de opciones políticas lo asuman y recojan en sus programas y estilo talante de gobierno, para que apuesten por una ciudadanía mas comprometida y vertebrada, de la que adolecemos y en lo que no se hace absolutamente nada por superar, pues ya les va bien, quitándose de en medio potenciales listillos, críticos y tocacojones, no entendiendo que tenemos todo el derecho a fiscalizar, a pedir cuentas, a una transparencia de los fondos públicos que lo son de todos, y que no es potestativo solo de la leal oposición. No nos kea naa por trabajar, pero será un sin sentido y canto de sirenas, meros lamentos, no crear las condiciones para favorecer avances desde abajo, pues desde las alturas, cúpulas y despachos de salón, no nos darán ni un ápice de esperanza, por falta de voluntad y concepción política. No harán nada por demostrar y por ende cambiar, aceptar la autocrítica, dudar al menos, de que la POLITICA necesita de nuevos vientos, de regeneración, de un amplio sentido de servicio, de nuevas formas.
¿Quien/es apuestan por ello?. Me niego al “todos son iguales”, pero solo se demuestra con nuevos compromisos, deseo, hechos, ganando credibilidad por diferentes en el reto de salir de este sombrío panorama, de este aletargamiento atomizante, acabando con privilegios y vasallajes. Si es así, nos encontraremos y si no, ¡caña al mono y denuncia del mas de lo mismo!. Y esto es posible en Melilla, solo es cuestión de creérselo.
Pedro Gallardo
Ciudadano

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu opinion, todos los comentarios seran publicados siempre que se atengan a unas normas basicas de respeto.

El informal de Fran no se hace responsable de los comentarios expresados en este post.

Correo de contacto, Escríbenos